Toni Segarra: Hace falta una generosidad máxima para un proyecto de colaboración como éste.

Gemma Ferraté y Marc Juvé: En cine no había referentes de cocreación, sólo ejemplos de varias piezas unidas. Tuvimos que inventarnos nuestra propia fórmula. Para escribir un guión entre 13 personas, debimos hacer muchas reuniones. Se decidió quién hacía cada capítulo por sorteo; quizás no te tocaba lo que te apetecía, pero eso es el azar. El final de la película se decidió a mano alzada.

TS: Esta fórmula, ¿serviría en un negocio o arte en que la autoría es muy importante?

GF y MJ: De hecho, el cine requiere mucha colaboración, hay un equipo inmenso detrás. En el caso de nuestra película ha ido genial. Si todas las películas fuesen como Puzzled Love, obviamente la industria del cine sería muy distinta. Probablemente la autoría no existiría. Sin embargo, hay una necesidad también de hacer lo que cada uno quiere.

TS: Como publicistas, somos creadores de pequeñas piezas cinematográficas, básicamente para la televisión. Pero ahora nos vemos obligados a colaborar con otros profesionales y a compartir la autoría, y no es tan fácil. Concebimos que la colaboración sucede de forma natural, pero no funciona sin un líder, alguien que dirija las cosas por un camino determinado. En vuestro caso, la película puede parecer de un solo autor.

GF y MJ: La película tiene grandes dosis de cohesión, gracias a la aparición de los mismos actores, que dan unidad al proyecto. El camino es lineal, como si hubiera un sólo director.

TS: ¿Se convierte a veces la colaboración en competencia? Para tener más protagonismo, para llevarse al cliente, para tener más poder de decisión…

GF y MJ: Como era un trabajo de clase no se generaron este tipo de conflictos, pero quizás fuera de la escuela sí pasaría. La colaboración, de hecho, se debe aprender, no nos han formado para colaborar.

TS: ¿La colaboración es posible sin un líder?

GF y MJ: Nosotros tenemos mucha conciencia de grupo, cuando nos dijeron que íbamos a San Sebastián, dijimos que si no íbamos los trece no iba ninguno. El proyecto es de todos.