En el 2012, los estudiantes fueron a Bogotá (Colombia) para realizar trabajos de prácticas. Se trata de un programa de tres años, y durante el cuarto semestre se hace una salida internacional —a San Francisco, Ciudad del Cabo, etc.—; en este caso, se trataba de Bogotá.
Bogotá no es como las ciudades de Dinamarca, donde tiene su sede KaosPilot. Allí nuestro objetivo era ofrecer proyectos en diversos sectores económicos. La intención inicial era llevar a cabo seis proyectos, pero los estudiantes no tenían bastante: ¡querían cien! En mayo de 2012 tuvo lugar el festival y en él se presentaron más de 300 iniciativas, lo que involucró a mucha gente. Eran proyectos sobre hacer las ciudades más verdes, conseguir los mismos derechos para mujeres y hombres, disminuir el consumo de drogas... El mayor reto era plantar la semilla para que el trabajo continuara una vez nosotros nos hubiéramos ido. Tuvo mucho éxito y se extendió a otras ciudades de Colombia y también a otros lugares de todo el mundo.
El modelo de KaosPilot se basa en la práctica, en la experiencia. No solo en leer y escuchar, sino también, y sobre todo, en actuar. Esta vertiente experimental se aplica a los estudiantes y, al mismo tiempo, a la propia institución, ya que el mundo avanza muy deprisa y las organizaciones deben ir adaptándose constantemente.
Nuestro currículum se basa también en el modelo de las competencias. Fomentamos el trabajo en equipo, la construcción de comunidades, la transmisión del conocimiento de unos a otros. Hay mucha gente que conoce a mucha gente, pero no hay suficiente acción: debemos promover la acción. Los emprendedores de esta sala sois los conductores del futuro, los que proporcionaréis las nuevas oportunidades y las nuevas posibilidades.